¿Tienes un coche GLP y no sabes qué puntos revisan en la ITV? ¿Te preguntas si su inspección es diferente a la de un coche de gasolina o diésel? ¿No sabes si necesitas algún certificado adicional? ¡Estás en el sitio correcto! En los últimos años, la creciente preocupación por el medio ambiente ha impulsado la aparición de alternativas más sostenibles, como los vehículos eléctricos, híbridos y los coches GLP. Estos últimos se han popularizado por ser una opción más económica y ecológica frente a los combustibles tradicionales.
Los vehículos de GLP tienen algunas particularidades respecto a los coches de gasolina o diésel, principalmente por el tipo de combustible y los sistemas de instalación asociados, como los depósitos y las válvulas de seguridad. Conociendo qué puntos se revisan y la documentación que necesitas llevar, la inspección se convierte en un trámite sencillo y previsible. A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre la ITV de coches GLP, los documentos necesarios y los elementos clave que se inspeccionan para que el proceso sea rápido, seguro y sin sorpresas desagradables.
Índice de contenidos
Qué son los coches GLP
Un coche GLP es un vehículo bifuel que puede operar tanto con gasolina como con gas licuado de petróleo (GLP). Este sistema le permite al conductor alternar entre ambos combustibles de manera sencilla, lo que no solo ofrece un significativo ahorro económico, sino que también reduce las emisiones de CO₂ y partículas contaminantes. Gracias a esta característica, los vehículos GLP suelen recibir la etiqueta ECO de la DGT, lo que les otorga beneficios como la posibilidad de circular por zonas de bajas emisiones.
El corazón de los coches GLP es su sistema de conversión, que está compuesto por varios elementos clave. El depósito de gas especial es el lugar donde se almacena el combustible a presión. Este se conecta a través de tuberías y válvulas de seguridad a un vaporizador, que convierte el GLP de estado líquido a gaseoso antes de que llegue al motor. Un sistema de conmutación inteligente permite que el coche arranque con gasolina para calentar el motor y, una vez que alcanza la temperatura adecuada, cambia de forma automática y suave a GLP. Todos estos componentes están diseñados y certificados bajo estrictas normativas de seguridad para garantizar su fiabilidad, algo que es fundamental en la ITV.
Documentación obligatoria en la ITV de un coche GLP
Si has comprado un coche que ya viene equipado de fábrica con GLP, para pasar la ITV solo necesitas asegurarte de llevar la documentación básica que acredita que el vehículo es seguro y cumple la normativa:
- Ficha técnica del vehículo (permiso de circulación): Este documento debe reflejar que el coche dispone de un sistema GLP homologado de fábrica. Es la base que permite al inspector verificar que el vehículo puede circular legalmente con gas licuado de petróleo.
- Placa identificativa del sistema GLP: Todos los coches con GLP llevan una placa oficial visible, normalmente en el compartimento del motor o cerca del depósito. Indica datos clave como el tipo de gas, la presión de trabajo y el número de homologación. Durante la ITV, el inspector comprobará que la información de la placa coincide con la ficha técnica.
Recuerda que si tu vehículo ha sido transformado de gasolina a GLP, además de la ficha técnica y la placa, necesitarás el certificado de instalación emitido por un taller homologado, que acredita que la conversión cumple la normativa y ha sido realizada correctamente.
Qué se revisa en la inspección técnica de vehículos GLP
Durante la ITV, además de los controles habituales (frenos, luces, neumáticos, prueba de emisiones, etc.), los coches GLP tienen una serie de revisiones específicas para garantizar que el sistema de gas funciona correctamente y de manera segura. Estos son los principales puntos que el inspector revisará:
#1 Depósito de GLP
Se comprueba el estado del depósito: ausencia de corrosión, deformaciones o golpes que puedan comprometer su seguridad. En los coches de fábrica, estos depósitos están diseñados para soportar altas presiones y cumplen estrictas normas de seguridad, pero aún así se verifica su integridad visual.
#2 Tuberías y válvulas
Se inspecciona que las tuberías que transportan el gas estén correctamente fijadas y sin signos de desgaste o fugas. Las válvulas de seguridad y de cierre automático también se revisan para asegurar que funcionen correctamente en todo momento.
#3 Sistema de conmutación
El inspector comprueba que el cambio entre gasolina y GLP sea correcto, que el indicador de combustible funcione adecuadamente y que no haya fallos en la conmutación que puedan afectar al motor o a la seguridad del vehículo.
#4 Distancias de seguridad
Se verifica que el depósito y las tuberías mantengan la distancia mínima de seguridad respecto a elementos calientes (motor, escape) o eléctricos, tal como establece la normativa. Esto evita riesgos de sobrecalentamiento o cortocircuitos que podrían generar accidentes.
#5 Integridad general del sistema
Finalmente, se comprueba que todos los componentes del sistema GLP estén en su lugar, sin modificaciones no autorizadas, y que la instalación coincida con la certificación de fábrica y la placa identificativa.
Normativa y frecuencia en la ITV de coches GLP
Los coches GLP deben pasar la ITV con la misma frecuencia que cualquier coche de gasolina o diésel. Sin embargo, presenta algunas particularidades específicas relacionadas con su sistema de gas. Así, por ejemplo, la normativa establece que los depósitos de los coches GLP deben ser sometidos a inspección cada 10 años para asegurar que no presentan corrosión, deformaciones ni otros daños que puedan comprometer la seguridad. Esta revisión puede coincidir con la ITV o realizarse de forma independiente si la legislación o el fabricante lo exige.
Además, los componentes del sistema GLP deben cumplir con normativas técnicas como el Reglamento ECE/ONU R-67 y otras regulaciones europeas de seguridad. Tanto los coches de fábrica como los adaptados deben contar con la homologación y los certificados correspondientes, como el certificado de instalación del taller homologado o el certificado de conformidad del fabricante. Estos documentos acreditan que el sistema instalado es seguro y cumple con la legalidad vigente.
Conclusión: Mantén tu coche GLP en regla y evita sorpresas en la ITV
Los coches GLP son una excelente opción que combina ahorro económico y responsabilidad ambiental. Para mantener estos beneficios, es fundamental que el vehículo supere la ITV con éxito. La clave está en la preparación y en comprender las particularidades de la inspección.
Recuerda que la ITV de los coches GLP se enfoca en la seguridad del sistema de gas, verificando que todos los componentes, desde el depósito hasta las tuberías, estén en perfectas condiciones y cumplan con estrictas regulaciones de seguridad. Tener la documentación en regla y revisar los puntos clave antes de la cita te permitirá convertir un proceso que podría ser complicado en un simple y rápido trámite.
Mantener tu coche GLP en óptimas condiciones no solo asegura que cumples con la ley, sino que también garantiza tu seguridad y la de los demás en la carretera. Si tienes que pasar la ITV y tienes cualquier duda, siempre puedes contactar con cualquiera de nuestras estaciones ITV para obtener más información. En ITV-Maco, estaremos encantados de ofrecerte toda la información y asistencia que necesites para que el proceso sea rápido y sencillo.