Qué es la Tarjeta ITV Electrónica y Cómo Funciona

¿Sabías que es obligatorio llevar en tu vehículo documentos como el permiso de circulación y la ficha técnica (tarjeta ITV)? ¿Has oído hablar de la nueva tarjeta ITV electrónica y sus beneficios? ¡Estás en el sitio correcto! En 2015, Tráfico dejó de utilizar la tarjeta ITV original e introdujo en su lugar la nueva tarjeta de inspección técnica electrónica. De ese modo, al pasar la ITV del vehículo, todo está monitorizado y la estación ITV tiene acceso directo a todos los datos de tu coche. Aun así, sigue siendo necesario traer el resto de documentos.

Los vehículos que fueron matriculados entre 2015 y 2016 fueron los primeros en dar la bienvenida a la ITV electrónica (eITV), dejando atrás la mítica ficha técnica verde que acompañaba al vehículo desde su matriculación para abrazar la nueva era digital. La tarjeta ITV electrónica hace que toda la información del vehículo esté accesible electrónicamente, algo que aporta muchos beneficios. Si quieres saber más acerca de esta novedosa tarjeta ITV, en este artículo te lo contamos todo en detalle.

Qué es la tarjeta ITV electrónica

Desde aproximadamente finales de 2015, los vehículos de nueva matriculación utilizan la tarjeta ITV electrónica, o eITV, un nuevo sistema electrónico que refleja los datos técnicos de un vehículo y su propietario. Esta tarjeta recoge toda la información que estaba presente en la ficha técnica a la que reemplaza, incluyendo marca y modelo del vehículo, número de chasis, potencia, cilindrada, peso, tara de montaje, número de asientos, matrícula, etc.

Fue desarrollado con la intención de crear una vía de comunicación entre productores e importadores y las agencias gubernamentales encargadas de la homologación y matriculación.

La tarjeta ITV electrónica proporciona los resultados de la ITV, tanto de la inspección inicial requerida como de las inspecciones posteriores realizadas tras los ajustes necesarios. Además, incluye el Número de Identificación del Vehículo Electrónico (NIVE) de 32 dígitos, que actúa de manera similar al DNI del vehículo. Es importante destacar que los conductores deben seguir llevando a la estación de la ITV una copia física de la ficha técnica del vehículo junto con la tarjeta ITV electrónica, tal como se ha hecho hasta ahora.

El sistema de tarjeta ITV electrónica agiliza numerosos trámites lo que ahorra tiempo y dinero al conductor. Sin embargo, este sistema también transmite electrónicamente la ficha técnica del vehículo al Registro de Vehículos Prematriculados, agilizando enormemente la compra y venta de vehículos.

La tarjeta de ITV electrónica es una hoja impresa que se ha convertido en una herramienta imprescindible porque agiliza todos los trámites relacionados con el vehículo y ahorra una importante cantidad de dinero a los conductores.

Qué datos aparecen en la tarjeta ITV electrónica

La tarjeta ITV electrónica contiene toda la información relativa al vehículo en cuestión guardada en un código de barras que sustituye a la ficha técnica de cartulina verde. El fabricante del vehículo es el encargado de expedir la tarjeta ITV electrónica, con la misma información que contenía la ficha técnica anterior:

• Cilindrada y peso.
• Marca y modelo.
• Matrícula.
• Potencia.
• Tara del conjunto.
• Número de bastidor.
• Número de Identificación de Vehículo (NIVE) que da acceso a los datos actualizados digitalmente, disponibles para su uso durante la ITV.
• Número de plazas.
• Nivel de emisiones.
• Cantidad de ITV realizadas, tanto periódicas como no periódicas.

Tipos de tarjetas ITV electrónicas

En 2015 entró en vigor el Real Decreto que permitió la informatización de la ficha técnica, obligando a las marcas a emitir la ITV electrónica, o eITV, para vehículos concretos y dando origen a una variedad de tarjetas ITV electrónicas entre las que destacan:

• Tarjeta ITV tipo A: Son las que han emitido los órganos administrativos correspondientes.
• Tarjeta ITV tipo B: Estos son los que ofrecen los fabricantes de los vehículos de tipos completos.
• Tarjeta ITV tipo C: Son tarjetas que los fabricantes sólo emiten para tipos de vehículos incompletos autorizados.
• Tarjeta ITV tipo D: Se trata de tarjetas que, según el fabricante, sólo se conceden a vehículos autorizados de tipo completado.

Qué vehículos deben tener la tarjeta ITV electrónica

Los conductores preguntan con frecuencia qué vehículos deben tener una tarjeta de ITV electrónica. La respuesta es bastante sencilla: cualquier vehículo nuevo que esté matriculado desde noviembre de 2015 o mayo de 2016, según la categoría a la que pertenezca. La clasificación ITV de vehículos tiene cuatro categorías:

• Categoría L: Se trata de motocicletas y ciclomotores, así como quads y otros vehículos pequeños de tres o cuatro ruedas y vehículos todo terreno. Las motocicletas de la categoría L pueden clasificarse con o sin sidecar. Los ciclomotores de tres ruedas con motores de menor cilindrada y pueden ir más rápido a velocidades máximas que los triciclos motorizados.
• Categoría M: Se incluyen en esta categoría los vehículos motorizados con al menos cuatro ruedas diseñados para el transporte de pasajeros.
• Categoría N: Estos automóviles se fabrican con el propósito de mover mercancía. Los camiones y furgonetas se incluyen en los grupos basados ​​en el tamaño.
• Categoría O: Tanto los remolques como los semirremolques entran en esta categoría.

La ITV electrónica no se le aplica si la matriculación de su coche se realizó antes de noviembre de 2016. La ficha técnica de estos vehículos todavía está impresa en papel de color verde; por eso, también se la conoce como la «ficha verde». Aunque eventualmente desaparecerá, deberás traerlo a la estación para tu cita con la ITV porque contiene todos los detalles de tu coche que se requieren para la inspección.

Beneficios de la tarjeta ITV electrónica

La tarjeta ITV electrónica ofrece numerosos beneficios para la administración, los ciudadanos y los fabricantes, sustituyendo de manera conveniente a la tradicional tarjeta verde (tarjeta ITV). Facilita el proceso de obtención del coche y ahorra tiempo y dinero en la emisión de duplicados de la ficha técnica. Las ventajas específicas son:

Beneficios de la tarjeta ITV electrónica para fabricantes y concesionarios

• Aumento de Productividad: Mejora en los procesos de autorización, envío y registro de emisión de tarjetas.
• Reducción de Costes: Elimina las visitas presenciales al ministerio y la DGT, y la necesidad de utilizar impresoras matriciales.
• Simplificación Logística: Hace que el procedimiento sea más sencillo y la corrección de errores más eficiente.
• Reducción de Tiempos de Almacenaje: Permite comprobar el estado de las solicitudes en tiempo real, acelerando el proceso de matriculación.

Beneficios de la tarjeta ITV electrónica para el titular del vehículo

• Ahorro de Tiempo: Reducción del tiempo necesario para matricular el vehículo y disponer de él.
• Facilidad de Procesos: Simplificación de trámites relacionados como la liquidación de impuestos.
• Acceso Directo a Datos: Los operadores de la estación ITV pueden acceder directamente a todos los datos, eliminando la necesidad de presentar la ficha técnica.

Beneficios de la tarjeta ITV electrónica para las administraciones públicas

• Mayor Productividad: Mejora en los procedimientos de tramitación, autorización y control de tarjetas ITV.
• Seguridad y Calidad de Datos: Implementación de medidas de seguridad adicionales para garantizar la validez, integridad y confidencialidad de los datos.
• Proceso Telemático: Eliminación de la entrada manual de datos en el Registro General de Vehículos, mejorando la calidad y reduciendo errores.
• Prevención de Fraudes: Facilitación de dispositivos de control para prevenir fraudes e irregularidades en la emisión de tarjetas y registros.

Cómo conseguir la tarjeta ITV electrónica

Antes de que existiera la tarjeta ITV electrónica había que seguir una serie de pasos para matricular un vehículo nada más salir de fábrica y el propietario, o los representantes del concesionario, debían estar presentes. Con la nueva tarjeta ITV electrónica ya no es necesario el tener que desplazarse porque todo el trámite es telemático. El proceso para conseguir la tarjeta electrónica es sencillo y es el siguiente:

• Los datos técnicos son enviados por el concesionario o fabricante al Registro de Vehículos Prematriculados, que después Tráfico verifica la información y registra el vehículo.
• Después, el Número de Identificación del Vehículo (NIVE) se envía al fabricante. Debido a que es específico de cada vehículo, este número ayuda a evitar problemas que podrían surgir por la duplicación en el bastidor.
• Los concesionarios comunican electrónicamente a la DGT la identidad del comprador. Este paso se conoce como ‘diligencia de venta‘.
• El procedimiento de matriculación se inicia cuando el coche ya figura inscrito en el Registro de Vehículos Prematriculados. El gestor lo hace presentando la solicitud de alta en la Jefatura de Tráfico junto con el número NIVE.
• Además de verificar los datos de la matriculación, la DGT los introduce en la Tarjeta de ITV electrónica y realiza su seguimiento en el Registro General de Vehículos.
• Finalmente, el sistema devuelve al gestor una copia de la Tarjeta de ITV electrónica y un permiso de circulación provisional con el número de matrícula asignado. El propietario ahora puede completar los trámites de seguro necesarios para operar su vehículo.

Conclusión: La tarjeta ITV electrónica agiliza procesos

En el pasado, los fabricantes debían entregar físicamente la documentación requerida al Ministerio de Industria, Energía y Turismo, donde, tras ser revisada y aprobada, se autorizaba la impresión de la ficha técnica. Posteriormente, se enviaba un formulario al concesionario o entidad financiera para completar el trámite en la Dirección General de Tráfico (DGT). Hoy en día, los servicios web han sustituido todos estos pasos, y la información de la tarjeta ITV está disponible en unos clicks.

La tarjeta ITV electrónica, que contiene datos detallados sobre las características técnicas del vehículo, su historial de inspecciones y mantenimientos, ha simplificado y acelerado estos procesos. Existen diferentes tipos de tarjetas dependiendo del tipo de vehículo, y actualmente, todos los vehículos nuevos deben contar con ella. Los beneficios son numerosos, desde la reducción del tiempo y costes en la gestión hasta la mayor seguridad y accesibilidad de los datos. Para obtenerla, los fabricantes y concesionarios utilizan servicios web que integran y automatizan todo el proceso.

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